Profanan iglesia de María Auxiliadora y escriben frase satánica con hostias consagradas

, 11 Ago. 23 (ACI Prensa).-
Esta semana, los feligreses de la iglesia de María Auxiliadora de Bejuco (Panamá) encontraron que el templo mariano había sido profanado y que las hostias consagradas estaban regadas en el piso, formando una frase satánica.

El acto sacrílego se habría cometido el miércoles 9 de agosto. En las imágenes difundidas por la prensa local se puede observar que un gran número de hostias fueron esparcidas por el suelo. Sin embargo, a la mano izquierda del altar las hostias fueron acomodadas para formar tres cruces y la frase: “Ariel satan, vive”. 

Además, varias imágenes de santos fueron movidas y colocadas contra la pared.

La Policía investiga quién o quiénes serían los autores de esta profanación, pero ha llamado la atención que las puertas y las ventanas del templo no fueron forzadas.

Esta no sería la primera vez que el recinto es profanado y los feligreses piden que se dé con los responsables. Además, como una forma de desagravio, algunos acudieron a las puertas del templo para rezar el Santo Rosario.

Esta iglesia no pertenece a los Salesianos, propagadores históricos de la devoción a María Auxiliadora, sino que se encuentra bajo jurisdicción directa de la Arquidiócesis de Panamá.

Por ello, el Vicario General de la Arquidiócesis, P. Carlos Mejía, habló sobre la importancia de cuidar los lugares de culto y de la formación en la fe. Asimismo, hizo un llamado a redoblar la oración.

¿Quién es “Ariel”?

Ariel es bíblico y aparece en el libro del profeta Isaías. Según la Biblia El libro del pueblo de Dios del Vaticano, este pasaje donde se le menciona hace referencia al “asedio y liberación de Jerusalén”. En la tradición judía, Ariel era otro nombre simbólico con que se le llamaba a Jerusalén.

Dice el profeta Isaías (29,1-2): “¡Ay, Ariel, Ariel, ciudad contra la que acampó David! Añadan un año a otro año, que las fiestas completen su ciclo: entonces yo oprimiré a Ariel, habrá gemidos y quejidos, y tú serás para mí como un ‘ariel’”.

Según la Enciclopedia Católica, en el templo de Jerusalén existía un “patio de los sacerdotes”. Allí había un altar de los holocaustos, cuya parte superior “consistía en el ariel” (corazón de Dios) y tenía un cuerno en cada esquina.

Cabe precisar que “ariel” en hebreo es “león de Dios”. No obstante, en la frase escrita durante la profanación del Templo de María Auxiliadora, aparece este nombre junto a la palabra “Satán”.

Algunos grupos ocultistas han asignado el nombre “ariel” a un demonio, y lo usan en algunos de sus rituales.